Código
IM-10-03-57-000-12-006414
Localización
IMBABURA, COTACACHI, 6 DE JULIO DE CUELLAJE (CAB. EN CUELLAJE)
Otra (s) Denominación (es)
Lengua(s) | Grupo Social |
CASTELLANO | MESTIZO |
Ambito
USOS SOCIALES, RITUALES Y ACTOS FESTIVOS
Subámbito
FIESTAS
Detalle del Subámbito
FIESTAS O CONMEMORACIONES RELIGIOSAS
Detalle de la Periodicidad
ANUAL / 20 de noviembre
Descripción de la Manifestación
La devoción a la Virgen del Quinche, una de las imágenes religiosas de mayor popularidad en el país, se manifiesta con gran fervor popular a nivel nacional. Tiene devotos de distintas regiones, muchos de los cuales buscan reproducciones de la imagen para tener cerca su virgen. En Cuellaje la fiesta de la Virgen del Quinche es la más importante de las fiestas religiosas porque está vinculada con la fundación e integración de la parroquia. De hecho, la Virgen del Quince es la patrona de Cuellaje. El centro de Cuellaje se formó sobre el área que correspondía a una hacienda de 200 hectáreas de extensión, propiedad de la familia Ayala Álvarez. Al enviudar, doña Eloísa Álvarez donó el terreno. El 22 de marzo de 1952 empezó la edificación de la iglesia a partir de mingas. Contemporáneamente a la construcción del edificio religioso surge el interés de doña Eloísa por tener una imagen de la Virgen del Quinche. El arriero Vicente Cabezas donó un pedazo de cedro, lo llevó a Ibarra para esculpir la imagen, que finalmente fue bendecida en la iglesia de Otavalo. Todos los costos, por un valor de 400 sucres, corrieron a cargo de doña Eloísa viuda de Ayala, fiel devota de la Virgen del Quinche. La imagen fue recibida con una gran fiesta en la parroquia. En aquella ocasión tocó la banda de Peñaherrera y celebró misa el cura Fernando Nofriso. Con la réplica de la imagen la devoción de la población creció y poco tiempo después empezó la romería, con el Padre Giovanni Paz. Desde entonces cada 21 de noviembre se realiza la procesión de la Virgen del Quinche en Cuellaje. La organización de la fiesta está a cargo del Consejo económico y pastoral de la iglesia, cuyo presidente es el sacerdote de la parroquia. La primera etapa de la celebración se inicia con la visita y la bendición que el sacerdote hace en cada una de las casas de todas las comunidades con la imagen de la Virgen del Quinche. Dependiendo del tamaño de la comunidad y la distancia que haya entre las viviendas, el recorrido puede durar uno o dos días. En este caso la imagen permanece durante la noche en una de las capillas de las comunidades de Rosario, San Joaquín o la Loma, donde además se celebra una misa. A lo largo de este recorrido se recoge limosna en cada hogar que se visita. El dinero recolectado se utiliza para la fiesta. El último año recaudaron $2-000. A las personas de la comunidad que viven fuera, se les envía un comunicado para que apoyen económicamente la celebración. Después del recorrido empiezan las novenas en la cabecera parroquial. En Cuellaje se forman nueve grupos, cada uno a cargo de la misa de las 5 de la tarde y de la fiesta de cada día. Cada grupo debe entregar igualmente una limosna. El recorrido se realiza, ya no con la réplica de la imagen de la virgen, sino con un cuadro. Aquí también se visita y bendice las casas, el cuadro se deja por un momento en los altares que preparan las familias mientras los presentes rezan una parte del Rosario. Cuando termina la novena, al día siguiente empiezan las vísperas. Se anuncian con voladores desde las cinco de la madrugada; por la mañana empieza a sonar la música de la banda – actualmente también música de disco móvil. En la tarde las comunidades participan con los carros alegóricos que llevan representaciones de la Virgen del Quinche durante el pregón. Luego, a las 5 pm se celebra una misa solemne donde participan varios sacerdotes. Asisten personas de otras parroquias para cantar. Al salir de la misa se prenden los juegos pirotécnicos. Las personas que vienen de las comunidades reciben comida; además se comparte chicha entre todos los presentes. Tanto la bebida como la comida se obtienen con el dinero de las limosnas. Debido a la gran afluencia de gente, hay muchos comerciantes que aprovechan la ocasión y visitan la parroquia para vender ropa en las calles del pueblo. A lo largo de la fiesta no se permite bailar ni consumir alcohol y hay guardias comunitarios y elementos de la policía nacional que vigilan la observancia de esta regla. Con el paso tiempo nuevas cosas se han ido integrando a la celebración. Al día siguiente, 21 de noviembre, se lleva a cabo la propia celebración de la Virgen del Quinche. La imagen es transportada por los policías en andas. Desde la comunidad del Rosario se inicia la procesión, que pasa por las comunidades de Nápoles y La Magdalena. Se escogió la comunidad del Rosario como punto de partida por ser la más distante. A lo largo del recorrido la gente se confiesa con los curas. La procesión termina con una misa final. Cada año la imagen de la Virgen y el Niño visten prendas nuevas donadas por los devotos: la Virgen, el manto y el vestido; el Niño, el velo y el vestido. La primera ropa que la Virgen recibió fue de las Madres del Carmen. La vestimenta de la imagen se cambia cada cierto tiempo.
Importancia para la Comunidad
La fiesta de la Virgen del Quinche es la celebración religiosa más importante de la parroquia 6 de Julio de Cuellaje. La fiesta religiosa ha consolidado a la población de la parroquia, dándoles un sentido de pertenencia, arraigándose en las tradiciones cuellajeñas e incorporando nuevos elementos a la celebración.